Por Carlos Clemente
Presidentes municipales en funciones se niegan a separarse de sus cargos mientras buscan reelegirse en este proceso electoral, el tema se ha convertido en un grave problema de ingobernabilidad que podría derivar en focos rojos de cara a la jornada electoral del 2 de junio.
De las 217 autoridades municipales en Puebla 103 buscan repetir en el cargo por un periodo más.
Lo grave es que apenas 33 de ellos se han separado de sus funciones.
El resto, 70 presidentes, se mantienen en el cargo público y realizan campaña con todo lo que ello implica.
Con toda la estructura financiera, humana y material de los respectivos gobiernos, a su disposición para la campaña.
Este entuerto legal amenaza con generar una grave crisis de gobernabilidad para el estado.
Se trata del 48 por ciento de presidentes municipales en la entidad que irán a las urnas buscando conservar el poder tres años más, pero sin dejarlo durante el periodo de campaña.
Un verdadero absurdo legal que los alcaldes aprovechan con cinismo.
En los últimos días han ocurrido diversos conflictos en municipios donde la autoridad municipal literalmente cerró las oficinas, abandonó sus funciones y ordenó a todos los servidores públicos irse a campaña.
Este martes, en Naupan un grupo de pobladores de la comunidad de Iczotitla, prendieron fuego en la puerta de la presidencia municipal, protestaron por el incumplimiento de obras prometidas por el alcalde Jaime Rodríguez Ramírez, quien busca reelegirse.
En el municipio de Xochiltepec, en la Mixteca, los pobladores denunciaron que llevan más de un mes sin agua potable, mientras la alcaldesa Sandra Lisset Toriz Castro, anda en campaña.
Situaciones similares ocurren municipios como Huauchinango con Rogelio López Angulo; en Jopala con Fabio Becerra Méndez; en Ajalpan con Sergio Sandoval Paniagua; en Coxcatlán con Camerino Montalvo; el impresentable Pedro Tepole en Tehuacán, por mencionar algunos.
Son ediles de todos los colores partidistas.
Todos tienen paralizados los gobiernos municipales y acumulan denuncias por el desvío de recursos en beneficio de sus campañas políticas. ¡Unos cinicazos!
A todo lo anterior sume que mantienen el control de los cuerpos de seguridad. El problema es real y crece a diario, no es exageración.
Ya corrió medio mes de campaña. ¿A qué hora los van a obligar a renunciar? @DiarioReporter