Por Carlos Clemente
Desde su fundación en 1982 los trabajadores del Colegio de Bachilleres del Estado de Puebla (Cobaep) no vivían un ambiente de terrorismo laboral, hostigamiento, represión y persecución como ocurre ahora en la gestión de José Luis Nájera Muñoz,
En las oficinas centrales de la Dirección General y sus 37 planteles, prevalece una política de violación permanente al Contrato Colectivo de Trabajo y a los derechos humanos del personal.
El doble licenciado y maestro -como se ostenta a pesar de carecer de cédula profesional-, llegó a dirigir el Colegio el 8 de febrero pasado.
Sin experiencia ni trayectoria en el área educativa como lo marca la norma de la institución. Pesó más la voluntad de la viuda, luego de años de ser el bastón del difunto, único mérito.
En apenas cuatro meses, Nájera Muñoz ha incurrido en múltiples violaciones a los derechos de los trabajadores.
Lo tiene documentado el Sindicato Independiente de Trabajadores del Colegio (Sitcobaep) cuyo secretario general, Ángel Martínez Nolasco, alzó la voz y exigió que cesen los abusos o mejor que se vaya del Colegio.
Existe un abultado expediente por al menos 20 despidos de trabajadores de base a quienes no se les respetó el debido proceso.
Hay constantes violaciones a la ley del USICAMM y a los derechos de trabajadores con años de antigüedad; se niega a pagar prestaciones a jubilados; obligó al personal a firmar una carta compromiso que va en contra de sus intereses laborales y sólo es un medio para infundir terror.
Desde el 23 de agosto de 2022, por ley debió entregar las cuotas sindicales al Sitcobaep, hasta el momento no lo ha hecho.
Este jueves, ocho trabajadores del plantel 36 de Villa Frontera fueron citados por la Dirección Jurídica, luego de enterarse de la conferencia de medios que ofrecería el sindicato.
Sobra decir que los directores de cada plantel también actúan como el director general en contra de los trabajadores. Sus acciones están bajo la lupa.
En poco tiempo, el doble licenciado ha evidenciado su incapacidad académica, pero también su gusto por el dinero fácil a través de la exigencia de fotografías oficiales, libros, cuotas y uniformes del alumnado.
Por si fuera poco, ha dado muestras de torpeza política al disfrazar como actividad académica un evento político a favor de Claudia Sheinbaum Pardo.
El pasado 3 de junio, literalmente acarreó a cientos de alumnos de al menos diez planteles, sobre todo de la zona metropolitana, para asistir al evento de la aspirante presidencial de Morena.
¿Será que Sheinbaum necesita de operadores políticos en Puebla con este nivel de estupidez?
Ignorante de los temas institucionales, se ha dejado asesorar por Dzoara Lisbeth Corona Rojas, quien permanece en la Dirección Académica desde los tiempos de Arturo Rodríguez Ballinas (diciembre de 2021), ambos íntimos de Melitón Lozano, tristemente célebre ex secretario de Educación. ¡El colmo! @DiarioReporter
