Por: Jesús Ramos
Se simulan ayudas gubernamentales a los damnificados del huracán Grace, se disfraza la peor crisis de inseguridad en la historia de Puebla, se oculta hasta el doble de muertes por Covid en el Estado, se esconde la fábrica de pobres en que se ha convertido esta administración estatal, se ataca a los enemigos y más… con un piquete de trasero. ¿En serio?
¿La vulgaridad cometida por un bromista puede ser misil del periodismo oficial e impulsarse desde un convenio como la nota del día? De no creerse. Pero sí.
Está clarísimo que el video tiktokero fue ascendido a tema informativo para distraer, pero también para lastimar a los que el gobierno estatal considera sus enemigos políticos y empresariales.
¿Tal vulgaridad puede integrarse a la batería de preguntas que en las mañaneras hacen los reporteros al gobernador Barbosa como si fuese algo espontáneo? Lo vimos. Sí.
Distinto a la prensa nacional, la de Puebla está bastante controlada. Las preguntas incómodas no se toleran ni se dejan pasar. Hay testimonios de regaños públicos de Barbosa a reporteros de la fuente por cruzar la frontera del control mediático.
La personalidad explosiva del gobernador es inocultable. A la vista del mundo ha puesto en vergüenza a funcionarios suyos y gente cercana. Nadie en sus cabales preguntaría, sin venia, cosa tan corriente a un mandatario a sabiendas de como es.
Quiénes urdieron esto bajaron al Ejecutivo a un nivel lamentable. La estrategia, si pudiéramos llamarle así, sólo pudo ser urdida por alguien igual de ordinario que el tiktokero pica traseros.
¿Vale el costo de la factura pública exponer a un gobernante, con ese tipo de estrategias “brillantes”, para enderezar ataques a exfuncionarios, políticos y empresarios y al mismo tiempo para ocultar lo mal que estamos en el Estado?
Me parece que no, sin embargo, será recordada en Puebla como lo que es, la estrategia de comunicación pica traseros.
El del Tik Tok, como aquellas víctimas colaterales involucradas, deben saber que estrategias de comunicación como esas, resulta bastante común observarlas en talleres, seminarios y cursos de comunicación. Sirven para explicar que en el reino de la incapacidad el disparate es rey.
Intenté imaginar a AMLO y a Jesús Ramírez en un montaje similar. No lo logré. En verdad se necesita ser muy atrevido, o no sé qué.
Ya para hoy la diputada suplente de Morena, detenida en posesión de armas, es nota. Y eso, damas y caballeros, se agradece. Alabado sea el Señor.
