Por: Jesús Ramos
Ganará López Obrador la consulta de revocación de mandato en Puebla el próximo 10 de abril. De eso no hay duda. Aquí el lío es conocer cuántos votos le llevarán a las urnas los morenos y el gobierno del estado.
Confirmado está que no le cumplirán el 1.7 millones que pidió. Ni de chiste. Ni el 1.5 millones que nuestra entidad le obsequió en la campaña presidencial del 2018.
Jorge Mota y Eric Cotoñeto cometieron el grave error de cargar la virgen y echar los cuetes, es decir, ser los grandes protagonistas de la operación negándose a involucrar a los grupos armentistas, nachistas, riveristas y demás.
En el pecado llevarán la penitencia. Será una catástrofe de dimensiones colosales en la que harán quedar mal políticamente a su patrón ante el Ejecutivo federal y que será notoria a la vista de nosotros los espectadores.
Julio Huerta le entró al quite con los presidentes municipales para atenuar el desastre ocasionado por Mota y Cotoñeto. Está intentando reducir el control de daños con la ayuda de los alcaldes y las estructuras gubernamentales.
Lo que no hicieron ese par en meses, será imposible que el primo del mandatario lo logre en los días que faltan.
Consultamos ayer a distintos grupos de Morena, contrarios al gobierno, y el común denominador fue que no los han tomado en cuenta ni les han apoyado absolutamente en nada.
Esa será su justificante en Morena nacional a la hora de rendir cuentas, dicen. La responsabilidad la tienen por entero los señores del gobierno y los números que arroje el ejercicio plebiscitario será asunto de ellos.
La verdad es que no tan en el fondo, los morenistas contrarios al poder estatal, comprenden que todo esfuerzo supremo por alcanzar la meta de sufragios demandada por López Obrador será capitalizada por el mandatario, Cotoñeto, Mota y Julio.
Ellos serían los héroes de la película papá. Y eso, ni de broma. En la pelea y en el amor todo se vale, y si los morenos opositores pueden hacer quedar mal a los ya citados por supuesto que la simulación será la mejor de sus armas.
El músculo operativo de Morena en Puebla está atrofiado y aun en el supuesto de que pudieran contribuir con la mitad del 1.7 millones de votos, en el ejercicio revocatorio, será un rotundo fracaso.
Debo confesar que no tengo mayores referencias de Cotoñeto, respecto a su honradez y honorabilidad, y tampoco me constan, pero fuentes del gobierno refieren que los recursos financieros destinados para la operación de la jornada plebiscitaria serán auditados por Julio Huerta debido a la desconfianza que el Señor le tiene al operador estrella. @DiarioReporter