Por Jesús Ramos y Carlos Clemente
La prisa de iniciar y concluir en tiempo record la remodelación urbana de la calle principal de Puebla 5 de Mayo, sin la aprobación del Consejo de Planeación Municipal y sin estudios técnicos que avalaran la ejecución de obra, costó la vida al niño Santiago Mozo Trejo por la caída de un árbol al que el ayuntamiento de Eduardo Rivera Pérez debilitó por cortarle las raíces para nivelarle losas y jardineras.
Fue el lunes 29 de agosto cuando ocurrió la tragedia en plena tormenta, no atípica, en medio del actual periodo de lluvias. El árbol se desplomó sobre el quiosco de venta de periódicos y revistas donde el menor se ganaba la vida. Sus padres se salvaron de milagro, sin embargo, Santiago no corrió con la misma suerte.
Empleados de tiendas departamentales, joyerías del Centro Comercial Plaza Puebla y taquerías, con visión frontal al árbol caído, entrevistados por @DiarioReporter, relataron que las raíces de la base de ese y otros troncos fueron cercenadas a escondidas y en dos noches consecutivas por el ayuntamiento de Rivera Pérez para que no fuera observada la negligente maniobra.
Recordaron que todos los árboles de la 5 de Mayo tenían las raíces primarias expuestas, mismas con las que los transeúntes y turistas frecuentemente tropezaban por haber colapsado las losas con el correr de los años.
La 5 de Mayo es insegura
Hoy no hay garantía de seguridad para que los ciudadanos transiten por la calle peatonal 5 de Mayo, consideró el regidor del ayuntamiento de Puebla, Ernesto Aguilar, al exigir a las autoridades corregir los errores para que los ciudadanos caminen y se cobijen en la sombra de los árboles sin correr el riesgo de que se les caiga encima.
“Los poblanos merecen caminar con la certeza de que este corredor reúne las condiciones adecuadas para que familias con niños transiten sin temor alguno”, agregó.
La primera obligación que tiene un gobierno es brindarle certeza y seguridad a sus gobernados, que esté garantizado que ellos puedan tener libre tránsito, sin miedo y preocupación que se les vaya a caer un árbol encima y puedan perder la vida.
Sobre la muerte del niño, sostuvo que se tienen que realizar las investigaciones pertinentes que determinen si hubo o no negligencia administrativa.
Pidió además que el gobierno de Eduardo Rivera transparente las condiciones bajo las cuales realizó la obra de remodelación urbana de la calle 5 de Mayo.
Entrevista completa del regidor del Ayuntamiento de Puebla, Ernesto Aguilar:
Los árboles de la calle 5 de Mayo no son árboles viejos que daten de la invasión francesa de 1862 como dice el gobernador Miguel Barbosa, fueron sembrados en 1977 y aunque la secretaria del Medio Ambiente Municipal, Myriam Arabian, asegura que se podaron el año pasado, a simple vista puede observarse que los cortes de las ramas datan de más tiempo.
Para la gente que labora en el comercio formal de la 5 de Mayo, la causa del desplome del árbol que mató al niño voceador fue que le cercenaran las raíces de mayor grosor, pues esos árboles habían soportado fuertes inclemencias del tiempo, lluvias, vientos y temblores, sin problema alguno.
Las jardineras, nivelación de losas y corte de raíces fueron obras realizadas también a los 49 árboles que todavía permanecen de pie y que, lo mismo que los dos árboles caídos en esa misma calle, representan latente peligro para las personas que por ahí caminan al haberles cercenado las raíces más gruesas.
Al cortar las raíces debitaron los árboles
Cuando construyeron las jardineras, los albañiles cortaron las raíces debilitando el soporte de los árboles, señala contundente la propietaria de un quiosco de periódicos ubicado sobre la calle peatonal 5 de Mayo y la 12 Oriente-Poniente, lugar donde se cayó un segundo árbol que por fortuna no lastimó a nadie ni causó daños.
Ese día no venimos a trabajar, explica, por fortuna el árbol cayó al lado opuesto de su caseta de periódicos, pero pudo haber causado una tragedia como el otro árbol.
Ante el tronco del árbol que aún permanece en el lugar, comenta que los árboles tenían unas raíces grandes, incluso la gente tropezaba con ellas, pero durante las obras de modernización fueron cortadas para poder hacer las jardineras.
Dijo que después de las obras, el ayuntamiento no ha querido ir a podar los árboles que se encuentran en el parque de la esquina, los cuales también representan un riesgo para la seguridad de los ciudadanos.
Entrevista con propietaria del quiosco de periódicos ubicado en calle 5 de Mayo y 12 oriente-poniente donde cayó un segundo árbol:
¿Cómo corregirá Eduardo Rivera Pérez el error cometido para garantizar seguridad a los parroquianos, turistas y comercio de la zona si las raíces primarias de los árboles les fueron retiradas?
Después de la desgracia del menor Santiago, Eduardo Rivera Pérez, apresuró la poda de árboles del zócalo de la ciudad de Puebla y otros del centro histórico para tapar el pozo después del niño ahogado, envió condolencias a la familia del infante, pero no les apoyó con gasto alguno, comentaron familiares notablemente indignados.
En el mejoramiento de la imagen urbana de la 5 de Mayo, conocido ahora como el Paseo de las Estatuas, no existe transparencia en el gasto público ejercido, aunque la autoridad habla de 36 millones de pesos, pues a la fecha ni el alcalde ni funcionarios de su ayuntamiento han presentado al cabildo el Programa de Obras 2022 donde se supone estarían incluidas esas y otras obras de la ciudad.
Los regidores del cabildo de Puebla capital desconocen la razón social de la empresa ejecutante de la obra que costó la vida al menor y que ha puesto en riesgo permanente a los parroquianos y turistas que deambulan por esa calle para pasear o realizar compras.
Con el propósito de abundar en la tragedia y el corte de las raíces realizado a los 49 árboles del Paseo de las Estatuas, este medio informativo acudió a las oficinas de Myriam Arabian, titular del Medio Ambiente del Ayuntamiento, dejamos nuestro contacto con su particular Laura López Rubí, pero la funcionaria evadió la entrevista.
El mismo intento se realizó con el coordinador de Comunicación Social, Fernando Cortés, sin embargo, hizo caso omiso a la petición, motivo por el que no pudo conocerse la postura y explicación de la autoridad municipal que la deslindara de la muerte del niño como del riesgo que representa la arboleda en la calle principal de la ciudad de Puebla, por donde caminan miles de personas diariamente.
El árbol caído tenía 45 años
El árbol caído en la 5 de Mayo, tenía 45 años plantado en ese sitio, data de la ejecución de un proyecto de peatonalización que las autoridades lograron con no pocas dificultades –por la oposición del transporte público- en el año de 1977, según cuenta David Ramírez Buitrón, investigador de la historia, memorias y tradiciones de Puebla.
Narró en sus redes sociales que el proyecto de peatonalización inició en 1975 con el «Día del Peatón» los fines de semana; con dificultad las autoridades lograron sacar al transporte público del corredor 5 de Mayo-16 de Septiembre, pero sólo se logró peatonalizar la 5 de Mayo a partir de Reforma a la 4 Oriente-Poniente.
Fue en 1976 que lograron cerrar el paso vehicular, instalaron maceteros en la 5 de Mayo y en octubre de 1977 plantaron los árboles en respuesta a reclamos sociales, pues los poblanos estaban molestos con el retiro de los que estaban en la Iglesia de San Francisco, los cuales se secaron al entubar el río.
Ordena Barbosa una investigación
El gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta, instruyó a la Secretaría del Medio Ambiente y al ayuntamiento de Puebla que, en el marco de sus facultades, investiguen las causas que propiciaron la caída del árbol que mató al menor de edad y se determine si existe alguna responsabilidad administrativa de alguna área del gobierno municipal.
Al tratarse de un hecho generado por la naturaleza, las responsabilidades no son del orden penal, sería en todo caso sanciones administrativas para los funcionarios que resultaran responsables, dijo.
También consideró apresurada la decisión de derribar árboles en el Centro Histórico porque representen un riesgo para la población.
Dijo que esta medida es más una reacción del gobierno de Eduardo Rivera Pérez ante un hecho trágico, por el fallecimiento de un menor para “taparle el ojo al macho”, afirmó. @DiarioReporter
