Por Jesús Ramos
Anda enojado con Estefan, no sabe perdonar, a él lo ha atacado, desprestigiado, al PRI dañado, mientras esté vivo no permitirá su regreso y menos que influya en las decisiones del partido, así lo advierte desde el fondo de su ancestral corazón indígena.
Néstor Camarillo envió la bella misiva con moño de regalo a través de #PokerDeAses al que en años recientes fuera su aliado y amigo en el tricolor, no le quiere de vuelta, le cerrará todas las rutas y posibilidades si lo intentara.
Estefan tendrá una versión probablemente distinta, que bien vale la pena escuchar en adelante, pero la del candidato a senador vomita el enfado de aquellos seres que en algún tiempo se amaron e hicieron acrobacias lindas juntos.
En el casillero de la venganza coloca Néstor el sentimiento de Estefan Chidiac por haber sido más listo que él en la obtención de la candidatura a la Cámara Alta del Congreso de la Unión cuando se suponía que el titular de la SEP la tenía en el bolsillo.
Que se quede donde está no le queremos de vuelta después de lo que hizo, no sería justo, hemos sido golpeados, atacados. Mientras yo esté en el PRI o mientras yo siga vivo no lo voy a permitir.
Sentenciado está, si la inteligencia de Estefan enciende la ilusión de retomar el control del PRI después de las elecciones del 2 de junio, las gemas del infinito en el guante de Néstor se lo impedirán, reta, advierte.
En menesteres distintos, sombras tenebrosas.
–Te has reunido en lo oscurito con gente de Morena –se le preguntó a Camarillo.
–No.
–Te reunirías con ellos si te invitaran.
–Sí. En política es importante escuchar.
(Esta historia continuará). @DiarioReporter