Por Carlos Clemente
Tuvieron que pasar siete meses de iniciados sus respectivos gobiernos municipales, para que los alcaldes de la zona metropolitana de Puebla lograran aterrizar una primera acción en beneficio de los ciudadanos.
Al parecer recién caen en la cuenta de que muchos de los problemas que golpean a sus gobernados se resolverían si tuvieran un poco de estrategia, coordinación y sobre todo comunicación.
Los alcaldes de Puebla, Eduardo Rivera Pérez; de Cuautlancingo, Filomeno Sarmiento; San Pedro Cholula, Paola Angón y San Andrés Cholula, Edmundo Tlatehui, este miércoles se alinearon para agitar una banderita e iniciar lo que denominaron primera jornada metropolitana de servicios públicos.
Su primera acción desde una perspectiva conurbada fue el mantenimiento a la recta a Cholula, una vialidad que atraviesa por los cuatro municipios participantes y que es fundamental para la movilidad en la zona metropolitana de Puebla.
Todos ellos son autoridades municipales emanadas del Partido Acción Nacional (PAN), pero además tienen en común múltiples problemas sociales de orden prioritario, como la inseguridad pública, el desarrollo económico, el crecimiento urbano, entre otros.
Como gobiernos municipales se han tardado demasiado tiempo en integrar una agenda común y los problemas sociales les van ganando terreno en todos sentidos.
A pesar de que presumen coordinación y comunicación, la realidad los desmiente un día sí y el otro también.
Al parecer sus múltiples mesas de trabajo son sólo para tomar café, pues hasta el momento no han arrojado estrategias efectivas para atender temas como el robo de autopartes, robo de vehículos, narcomenudeo, asalto al transporte público, homicidios, entre otros problemas que tienen agobiados a los ciudadanos.
Por otra parte, mal harían los alcaldes panistas si este pacto de colaboración sólo es una fachada y en realidad es una alianza con fines políticos y electorales con miras a empoderar a Eduardo Rivera rumbo al 2024.
Perverso como es, el alcalde poblano seguramente ha empujado esta alianza endulzando el oído de sus colegas sobre la enorme conveniencia de jalar parejo para lo que viene.
Nada mal, sólo habría que recordarles que antes del 2024 está el 2022 y el 2023. Y como van, a siete meses de su gestión, todos ellos están quedando a deber mucho a sus gobernados. No es percepción, es realidad. @DiarioReporter