Por Carlos Clemente
Previo a la visita del presidente López Obrador a Puebla, el gobernador Barbosa se apresuró rechazar y desmentir sin éxito dos temas graves de su gobierno: el clima de inseguridad contra las mujeres y la presencia de cárteles en la entidad.
Es decir, en Puebla no pasa nada, señor presidente. Todo sereno.
En su mañanera del martes, lanzó: “en Puebla no hay levantones, pareciera como si hubiera una gran confabulación contra las mujeres, eso que se está diciendo son campañas de desprestigio”.
Afirmó ante versiones periodísticas y publicaciones que inundaron las redes sociales sobre varios casos al respecto.
El mandatario se puso en sintonía discursiva con el líder moral de la cuatroté y arrojó la piedra a la derecha, a los conservadores que quieren desprestigiar el momento que se está viviendo, aseguró.
Sin embargo, anoche la Fiscalía General del Estado (FGE) informó de siete detenidos involucrados en el secuestro de Sandra Elizabeth Pérez Portillo, de 32 años de edad levantada la noche del 27 de abril pasado en Amozoc, aunque ella aún no aparece.
Familiares de Karla Álvarez Álvarez, exigen el apoyo del gobierno estatal, la joven de 20 años de edad fue levantada en Acatzingo por sujetos armados la semana pasada.
La Universidad Anáhuac, documentó el caso de una alumna quien denunció un intento de levantón cuando caminaba sobre calle Orión Norte y la incorporación al Periférico.
Por si fuera poco, la secretaria de Seguridad Ciudadana, María del Consuelo Cruz Galindo, admitió dos intentos de secuestro en fechas recientes, en la junta auxiliar Ignacio Romero Vargas y en Bosques de San Sebastián, las víctimas recibieron acompañamiento y presentaron sus denuncias ante la FGE.
Alguien le oculta los hechos y las denuncias o con toda la mala fe el mandatario busca minimizar el clima de inseguridad en la entidad.
De los feminicidios y las y los desaparecidos, mejor ni hablamos.
El segundo tema que rechazó el ejecutivo es que “en Puebla no hay presencia de cárteles nacionales que controlen la actividad delincuencial”.
A la vista del gobierno estatal las bandas criminales que operan el tráfico de migrantes, el robo de camiones de carga, el huachigas, el huachicol en la zona del triángulo rojo, las narcomantas, el tráfico de droga y la disputa de plazas que ha derivado en múltiples ejecuciones y un tiradero de cadáveres, son grupos locales y sin conexión con cárteles nacionales.
Vaya manera de jugarle al avestruz y eludir su responsabilidad.
La realidad rebasa el discurso del barbosismo. @DiarioReporter.