Por: Jesús Ramos
Comienzan a tenderle la cama a Ana Lucía Hill para sacarla de la Secretaría de Gobernación del Estado, ayer lunes desde las primeras horas, y sin decirle agua va, ingresaron a su dependencia alrededor de 40 gentes de la Secretaría de la Función Pública de Amanda Gómez Nava.
Eran las 17 horas y continuaban revisando básicamente cinco cosas, el trato al personal administrativo, asuntos de acoso laboral, aviadores, facturación por alimentos y horarios de entradas y salidas.
¿Por qué tomaron por sorpresa a Ana Lucía? Existen denuncias enviadas al gobernador Barbosa contra presuntas firmas de asesores y consultorías de la Ciudad de México que cobran a través de aviadores y trabajan de manera alterna para la alta funcionaria.
Una de esas denuncias en poder de este reportero señala a Jogin Elizabeth Abreu como la encargada de coordinar a los consultores y asesores que prestarían sus servicios a Ana Lucía, pero no al gobierno del estado.
Otros señalados, aunque estos por malos tratos al personal son Claudia Marlene Tenorio Urdubay, Norma Angélica Delgadillo, Tamara Libia Díaz Villanueva y la secretaria particular Silvia Andrea Herrera.
Tengo la impresión de que ni Ana Lucía se siente ya a gusto en Gobernación ni el Ejecutivo con el rol que desempeña su funcionaria al frente de la dependencia más importante del gabinete.
Fuentes de buena categoría revelan que la única comunicación que Ana Lucía sostiene con Barbosa es en las mañaneras y después de esa interacción no vuelven a verse en toda la jornada.
Las mismas fuentes cercanas a ella dicen que se traslada el viernes a la Ciudad de México para regresar los lunes. El mandatario no le requiere y a Ana Lucía tampoco le preocupa lo que ocurra en la entidad poblana los fines de semana.
En una entrega de la semana pasada revelamos de señalamientos en contra suya, de parte de empresarios, quejándose de clausuras de Protección Civil sin aparentes motivos con altos costos económicos para liberar sus negocios.
También, las denuncias de corrupción dirigidas al Registro Civil por cobro de servicios que serían gratuitos, correcciones en documentos oficiales con tarifas altas y celebraciones de casamientos fuera de competencia de jueces a precios exorbitantes.
Definitivamente Amanda Gómez no se habría atrevido a realizar la auditoría sin la orden expresa del gobernador, lo que puede ser el adelanto de las golondrinas. @DiarioReporter