Por: Jesús Ramos
Fuerte, tremendo el video que muestra el inocultable malestar que le provoca Barbosa a López Obrador. En la mañanera del 5 de mayo, el jefe de la nación pasa al lado del poblano con gran indiferencia, sus ojos ni siquiera voltearon hacia él…
Y esto lejos de alegrarnos, tendría que preocuparnos, pues cuando un mandatario estatal enfada al Presidente de la República, los efectos de la mala relación impactan en lo negativo a los habitantes de sus demarcaciones de diferentes maneras.
Ignoro si exista alguna relación de lo que acabo de mencionar en las últimas líneas, pero la semana pasada AMLO anunció que optimizaría los servicios de salud de 10 estados del país antes de que concluyera el 2022, está Tlaxcala entre los 10, no así Puebla.
Lo que la prensa palera ha intentado ocultar los últimos dos años ya es inocultable, la animadversión que Andrés Manuel siente por Luis Miguel es muy evidente.
José Luis, el tipo que guía al mandatario, le avisa quedito que el Presidente se acerca a ellos. Barbosa alista el saludo, permanece de pie, prepara la mejor sonrisa. Será su primer encuentro desde su arribo a suelo poblano. Oh desilusión, AMLO pasa de largo sin siquiera verle.
Ninguna intención tuvo de detenerse, la escena fue grabada en video, pero toda ella pasa a todo color frente a los ojos del mundo, era la mañanera desde Puebla.
Después de la triste escena, Barbosa pretende sentarse en la silla de Adán Augusto, sin embargo, el secretario de Gobernación le sujeta del brazo y le empuja levemente al siguiente lugar. Los videos de ambos incidentes pueden corroborarse.
En junio del 2020 ocurrió exactamente lo mismo. López Obrador le remilga el saludo al Ejecutivo poblano en San Pedro Cholula, esquiva su mirada, para evitarle, observa la fachada del convento de San Gabriel.
Esto no es bueno. Para nada. Que nuestro gobernador no esté en el ánimo de López Obrador nos afecta como poblanos. Lo hemos dicho antes, cuando su esposa Beatriz Gutiérrez visita Puebla elude todo encuentro y cortesía con Barbosa. La mala relación no es sólo con él, también con la esposa del Ejecutivo de la nación.
Conversando hace unos días con un barbosista de hueso colorado me hablaba de la espléndida química de Adán Augusto con el mandatario poblano datada desde que ambos fueron senadores, seguramente es cierto, aquí el asunto es que el titular de Gobernación tiene un jefe y ese jefe no tiene la misma química con el gobernador y tampoco su esposa. Vaya desgracia. @DiarioReporter